Recomendaciones

Directrices

Medidas recomendadas

Crear políticas relacionadas con el aprendizaje móvil o actualizar las ya existentes.

• Examinar el potencial singular y los retos que presenta la tecnología móvil para la educación y, cuando corresponda, incorporar las conclusiones extraídas a las políticas relativas a las TIC en la educación.
• No prohibir de manera general los dispositivos móviles. Las prohibiciones universales, a menos que se apliquen por motivos bien fundados, son instrumentos contundentes que normalmente obstaculizan las oportunidades educativas e inhiben las innovaciones en la enseñanza y el aprendizaje.
• Ofrecer asesoramiento sobre la forma de combinar nuevas inversiones en tecnología con inversiones e iniciativas existentes en materia de educación.

Capacitar al personal docente para que impulsen el aprendizaje mediante tecnologías móviles

• Dar prioridad al desarrollo profesional del personal docente. El éxito del aprendizaje móvil depende de la capacidad de las y los profesores para sacar el máximo partido de las ventajas pedagógicas que ofrecen los dispositivos móviles. Proporcionar la capacitación técnica y pedagógica necesaria al personal docente al introducir soluciones y oportunidades de aprendizaje móvil. Muchos de ellos saben utilizar los dispositivos móviles, pero otros muchos no; además, a medida que los dispositivos van adquiriendo más versatilidad y complejidad también se vuelven más difíciles de utilizar.
• Alentar a los centros de capacitación de personal docente a que incorporen el aprendizaje móvil en sus programas y planes de estudio.
• Ofrecer a las y los educadores oportunidades para que compartan estrategias a fin de integrar eficazmente la tecnología en instituciones con recursos y necesidades similares.

Proporcionar apoyo y capacitación al personal docente mediante tecnologías móviles

• Velar por que, en la medida de lo posible, las y los docentes puedan acceder a programas y planes de estudio, recursos pedagógicos y planes de clase a través de dispositivos móviles. Si bien muchos proyectos de aprendizaje móvil ponen los recursos a disposición del alumnado, hay pocos que se dirijan específicamente a las y los docentes.
• Explorar la viabilidad de ofrecer posibilidades de desarrollo profesional y capacitación de docentes mediante la tecnología móvil. Este sistema puede complementar, pero no sustituir, la capacitación presencial a menudo necesaria para cambiar verdaderamente las convicciones de las y los docentes y mejorar su práctica.

Crear contenidos pedagógicos para utilizarlos en dispositivos móviles y optimizar los ya existentes

• Garantizar la facilidad de acceso a los recursos y contenidos pedagógicos, incluidos los depósitos de archivos en línea, desde dispositivos móviles.
• Apoyar la apertura de las licencias de los contenidos móviles para facilitar un uso y adaptación lo más amplios posible. Para lograr este fin se puede apoyar la utilización de recursos educativos abiertos.
• Crear incentivos para que las personas encargadas de la elaboración de programas de estudio ideen contenidos específicos para dispositivos móviles. Si bien es posible ‘migrar’ materiales pedagógicos desde computadoras y libros de texto a tecnología móvil, deberá pensarse primero en este tipo de tecnología, tomando decisiones sobre la forma de simplificar la presentación y utilización de los contenidos en dispositivos con pantallas pequeñas y opciones limitadas de incorporación de datos.
• Alentar la creación de plataformas o programas informáticos que permitan al personal docente en ejercicio (y a otros interesados con conocimiento de primera mano de los educandos) crear o adaptar contenidos móviles.
• Promover la creación de contenidos móviles pertinentes para grupos locales y accesibles en lenguas locales. Para ello se puede invitar a las personas encargadas de la elaboración del lugar a que preparen contenidos de aprendizaje móvil para sus comunidades.
• Propugnar la elaboración de normas que hagan accesibles los equipos, los programas y los contenidos móviles a grupos diversos de educandos, incluido el alumnado con discapacidad

Velar por la igualdad de género de los educandos

• Paliar las diferencias existentes entre los sexos en lo que respecta a las TIC en la educación, alentando a las mujeres y las niñas, así como a los hombres y los niños, a aprovechar la tecnología móvil para el aprendizaje.
• Encontrar modos de normalizar la propiedad y el uso de teléfonos móviles por parte de mujeres y niñas en particular, teniendo en cuenta los aspectos culturales.
• Elaborar estrategias para enseñar a mujeres y niñas, así como a hombres y niños, competencias pertinentes en materia de TIC.

Ampliar y mejorar las opciones de conectividad garantizando la equidad

• Evaluar la infraestructura de TIC existente y establecer objetivos realistas para mejorarla gradualmente, prestando especial atención a las zonas donde los servicios son insuficientes.
• Apoyar la oferta de redes móviles sólidas y asequibles dentro de las comunidades y entre ellas, especialmente en instituciones educativas como escuelas, universidades y bibliotecas.
• Estudiar la posibilidad de ofrecer subsidios totales o parciales para acceder a datos móviles y servicios de banda ancha. Muchos gobiernos ofrecen subsidios de “tarifa electrónica” para fomentar el acceso a Internet con fines educativos mediante computadoras. Además, los gobiernos deberían considerar la posibilidad de impulsar los subsidios de “tarifa móvil” para promover el acceso móvil a Internet.
• Apoyar los esfuerzos por construir redes locales y especiales en apoyo del aprendizaje móvil, especialmente en lugares donde no existen redes más grandes.

Elaborar estrategias para proporcionar acceso en condiciones de igualdad para todos y todas

• Garantizar el acceso en condiciones de igualdad a la tecnología móvil y la participación en el aprendizaje móvil a todos los educandos y docentes. En el caso de los modelos en que el alumnado aporta sus propios dispositivos, los gobiernos deberían adoptar medidas para proporcionar equipos móviles y conexión a las y los educandos que no dispongan de ellos.
• Cuando sea posible, permitir que el alumnado “posea” su propio dispositivo móvil. Una de las principales ventajas del aprendizaje móvil es que abre las oportunidades educativas tanto dentro como fuera de las escuelas. Si las y los alumnos no son plenamente dueños de sus dispositivos, es poco probable que los utilicen como herramientas personalizadas de aprendizaje y los empleen en contextos informales.
• Alentar a las instituciones públicas y educativas a que negocien con proveedores y aprovechen el poder adquisitivo de un gran número de educandos.

Promover el uso seguro, responsable y saludable de las tecnologías móviles

• Promover el uso responsable de los dispositivos móviles mediante la enseñanza de la ciudadanía digital.
• Cuando sea posible, adoptar “políticas de uso responsable” en lugar de “políticas de uso aceptable”. Las políticas de uso responsable contribuyen a destacar y reforzar los hábitos saludables al tiempo que garantizan que las y los educadores no se vean obligados a controlar la utilización de los dispositivos móviles, una tarea en gran medida inútil para las y los instructores que pueden ver a cientos de alumnos y alumnas en el aula en un solo día.
• En contextos en que existe una grave preocupación porque el tiempo que se pasa ante la pantalla es excesivo o hay un abuso de las TIC, elaborar estrategias para equilibrar la interacción en línea y en la vida real. Además, diferenciar entre el tiempo productivo y no productivo, así como saludable y no saludable, que se pasa ante la pantalla.
• Mantenerse al día de las investigaciones relativas a los posibles riesgos que entrañan las tecnologías móviles para la salud.

Utilizar la tecnología móvil para mejorar la gestión de la comunicación y la educación

• Promover los usos de la tecnología móvil destinados a “fortalecer el sistema”.
• Alentar a las escuelas y a las y los educadores a que se comuniquen con el alumnado y los y las progenitoras mediante dispositivos móviles.
• Ampliar el alcance y la eficacia de los sistemas de información y gestión de la educación integrando el apoyo a las tecnologías móviles.
• Estudiar la forma en que las tecnologías móviles pueden apoyar la reunión de información pedagógica tras un conflicto o un desastre.

Aumentar la conciencia sobre el aprendizaje móvil mediante actividades de promoción, el liderazgo y el diálogo

• Destacar y mostrar la forma en que la tecnología móvil puede contribuir a mejorar la enseñanza, el aprendizaje y la administración.
• Compartir las conclusiones y las evaluaciones de las investigaciones sobre programas de aprendizaje móvil.
• Alentar el diálogo entre los principales interesados (como personal de dirección, docentes, alumnado, familia, lectores y lectoras locales y organizaciones de base comunitaria) acerca del aprendizaje móvil.
• Ofrecer una visión coherente del modo en que la tecnología, incluidas las tecnologías móviles, puede impulsar los objetivos de aprendizaje.